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Si buscas episodios que te hagan desconectar de la rutina, un escape espiritual o bien una historia que te ayude a encontrar sentido a tu existencia, la lista de Living la vida Vogue propone 10 opciones diversas y destinadas a complacer todo tipo de almas. Porque nunca es tarde para descubrir la magia de Toni Soprano, Don Draper o Dale Cooper.
-Los Soprano: un examen quirúrgico -digno del mejor cirujano- del verdadero significado de los lazos familiares, la amistad y las relaciones personales; al que además unimos un análisis terapéutico de los sueños, filias y fobias. Todo eso, es Los Soprano. No te dejes arrastrar por su aparente similitud con el mundo de Scorsese y sus fantasías mafiosas. Sí, hay mafia y alguna que otra muerte, pero Los Soprano es mucho más y una vez descubierta esta subtrama fundamental, nunca podrás ver otra serie con los mismos ojos. Están Toni and co. y luego el resto del mundo.
'LOS SOPRANO' ES CONSIDERADA POR GRAN PARTE DE LA CRÍTICA COMO LA INICIADORA DE UNA TENDENCIA EN FICCIONES TELEVISIVAS QUE APOSTABA POR LA CALIDAD
-The Wire: una amiga me comentaba hace poco lo mucho que le costaba concentrarse en la lectura, la televisión o cualquier otra actividad que requiera vaciar la mente en lo que estás haciendo en ese instante. Justo entonces, pensé: tienes que ver The Wire. Porque la serie de David Simon es como una de esas asignaturas imposibles a las que debíamos hacer frente en el instituto con ayuda de un profesor de apoyo. Compleja pero extrañamente gratificante. ¿Existe la posibilidad de que una serie analice el funcionamiento corrupto y errático de una sociedad moderna cualquiera? Sí, y The Wire lo consigue. El viaje no será fácil y te exigirá un grado de entrega máximo, pero la recompensa es eterna.
'THE WIRE' ES UNA FICCIÓN DESTINADA A MOSTRAR (Y COMPRENDER) EL FUNCIONAMIENTO CORRUPTO DE LA SOCIEDAD EN TODOS SUS ESTRATOS
-Twin Peaks: la sensación corporal que se experimenta cuando visionas Twin Peaks por primera vez es indescriptible. Para muchos, supuso el inicio de un romance sin precedentes con la obra del siempre enigmático David Lynch. Para otros, el descubrimiento de un género televisivo -y cinematográfico- que luego ha sido copiado y versionado hasta la saciedad. En ambos casos, la experiencia es única. Si te digo que en un pequeño pueblo -donde siempre llueve- aparece el cuerpo sin vida de la chica más popular del condado, si añado que la joven en cuestión se llama Laura Palmer y que la frase ‘fuego camina conmigo’ es el incio y el final de todo, la historia comienza a ser familiar, ¿verdad? Perfecta para los que buscan algo más que lo real.
'TWIN PEAKS' CREÓ ESCUELA Y SE CONVIRTIÓ EN EL MÁXIMO EXPONENTE DE UN GÉNERO ÚNICO
-Mad Men: beber, fumar y amar -o pecar-. Siempre que vemos un capítulo de Mad Men, deseamos hacer lo anteriormente propuesto de forma compulsiva. La vida de un grupo de publicistas en la Avenida Madison de Nueva York, las vicisitudes de sus infelices -pero perfectas- esposas en los suburbios y la entrada en tropel del pecado -por la puerta de atrás-. Nunca una serie captó mejor la esencia de los años 60’s, el germen de la sociedad actual. Prepárate para el vacío existencial, el análisis del capitalismo y unas formas tan bellas y sutiles que te atraerán enormemente. Don Draper está a punto de convertirse en un personaje icónico, así que es momento de tomar el tren que conduce a la nada y que nos plantea preguntas -de las que duelen- con un precioso envoltorio. Cheers!
'MAD MEN' ES UNA SERIE CREADA PARA DISFRUTAR A TODOS LOS NIVELES (FORMA Y CONTENIDO)
-Friends: todo el mundo ha visto Friends, pero la historia es que en realidad nadie ha visto Friends. Porque no nos referimos a poder contar lo mucho que te reíste viendo tal o cual capítulo un dia después de comer, sino saber por qué Mónica es un loca de la limpieza y el orden, o la obsesión de Ross con un programa musical y su baile secreto o que Rachel se operó la nariz y tiene dos hermanas insoportables. Es decir, ver Friends es haber visionado desde la primera hasta la última temporada, en orden, y entonces sí que podrás decir que nunca te has reído tanto con una serie; porque entenderás a los personajes y comenzarás a identificar a cada uno de ellos con las personas de tu entorno. Eso no tiene precio.
EL CONCEPTO CONTEMPORÁNEO DE 'AMISTAD' NO PUEDE ENTENDERSE SIN 'FRIENDS'
-Sexo en Nueva York: como ocurre con casi el 90% de las cosas que prejuzgamos, Sex and the city no es lo que parece. Esta serie nos ha ayudado a comprender que en el tema de la relaciones personales se cometen errores -y muchos- y que la idea no es caer en una depresión -que para eso ya tenemos la perspectiva de Lena Dunham- sino reírnos bien alto y bien fuerte. También aprendimos que podemos aspirar al infinito y llegar a lo más alto en nuestra profesión, mientras nuestra agenda de citas echa humo y que algún día, en un futuro no muy lejano, querremos vivir en el Village. Y todo esto revestido con humor y un anecdotario capaz de arrancar carcajadas a los más escépticos.
LAS CHICAS DE 'SEX AND THE CITY' PUSIERON SOBRE LA MESA LA LIBERTAD SEXUAL FEMENINA
-A dos metros bajo tierra: dicen que esconder la muerte es un error de nuestro tiempo. Todo tiene un principio y un final, y ahí reside precisamente la magia de la vida, así como el significado de la frase 'vivir el presente'. A dos metros bajo tierra es una serie que propone la observación de la vida desde la perspectiva de una familia que convive con la muerte a diario gracias al negocio funerario que regentan. La que escribe acaba de iniciarse, pero solo puedo decir que la historia me interesa demasiado y que deseo verla desde hace tanto tiempo, que me pongo nerviosa antes de cada nuevo capítulo.
'A DOS METROS BAJO TIERRA' RELATA LOS PROBLEMAS FAMILIARES DESDE LA PERSPECTIVA DE UN NEGOCIO FUNERARIO
-The Twilight Zone: aquí me permito una licencia y el puesto nº8 de nuestra lista está ocupado por una pequeña frikada. Nuestra fascinación por lo desconocido tiene un origen.The Twilight Zone proponía una serie de mini relatos terroríficos que jugaban con la sensibilidad del espectador hasta puntos insospechados, y cuyo éxito trajo consigo una franquicia de películas, series, programas de radio y comics. Cierto que hay un desfase temporal en las formas que puede provocar alguna que otra risotada, pero el efecto sigue siendo el mismo.
NUESTRO AMOR POR LO PARANORMAL NO NACIÓ CON 'CUARTO MILENIO', SINO CON 'THE TWILIGHT ZONE'
-Homeland: la inclusión de esta serie ha sido objeto de debate. Vale que la última temporada es de lágrima -y no lo digo en el buen sentido- y que a sus guionistas se les ha ido tanto de la manos que la trama se ha convertido en un culebrón venezolano. Pero, seamos sinceros, las dos primeras temporadas son un auténtico espectáculo y enganchan de una manera como pocas ficciones consiguen; así que solo por esos 24 capítulos iniciales, merece la pena. Ah, por si todavía existe alguna persona que no sepa de qué va esto, Homeland relata la vuelta a casa de un soldado norteamericano que había sido raptado por una organización terrorista islámica. ¿Seguirá el sargento Brody siendo el mismo?
-Breaking Bad: se trata del último fenómeno televisivo y la absoluta triunfadora de la pasada edición de los Globos de Oro. Desde que leí la enardecida carta que el maestro Anthony Hopkins dedicó al cast -y en especial a Brian Cranston- con motivo del final de la serie, no puedo esperar a ponerme con ella. Todos los fans afirman que la historia relatada (un profesor de química reconvertido en camello) recompensa como pocas. Sin embargo, creo que me veo avocada a comparar cada nueva serie a la que me enfrente con mis adorados Sopranos, y ésta no será una excepción.
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