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Gracias a la exposición Harry Potter: A History of Magic que se puede ver en la Biblioteca Británica de Londres, están saliendo a la luz nuevos detalles sobre la saga mágica creada por J.K. Rowling. Tras conocer más sobre el origen de la profesora Sprout y la creación del símbolo de las Reliquias de la Muerte, ahora descubrimos que en un principio Cornelius Fudge iba a ser un personaje muy distinto… además de muggle.

El Ministro de Magia con el que Harry tuvo tantos enfrentamientos era un político muggle en los primeros borradores de la historia. Su conexión con los magos se producía, según explica Radio Times, tras un encuentro con Hagrid, quien le avisaba de unas misteriosas muertes causadas por un enemigo al que no se atrevía a nombrar y le pedía que avisase a la población del peligro, tras lo cual se veía obligado a convocar una rueda de prensa. ¿Te suena? Eso se debe a que una escena similar se puede leer en Harry Potter y el Misterio del Príncipe, cuando el propio Fudge va a visitar al Primer Ministro británico para avisarle del regreso de Voldemort.

Además, esta versión alternativa de Fudge conocía a Vernon Dursley, con quién no se llevaba bien, pues el Ministro creía que el tío de Harry estaba detrás de su puesto y opinaba que, ahora que había dado mala imagen públicamente tras la rueda de prensa en la que advertía sobre "un hombrecito con ojos rojos", iba a conseguirlo. Lo sorprendente es que Dursley optaba por contarle la verdad sobre el mundo mágico y su sobrino

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